México, a 12 de noviembre.- Como ha sido una constante en los últimos meses, Asia se ha convertido en epicentro de las nuevas tendencias entre las Oficinas Familiares; entre estas, la visión de las nuevas generaciones con respecto a diversificar las carteras de inversión bajo perspectivas ESG (environmental, social and governance).

Dicha situación, se deriva de los efectos de la pandemia, primero porque en el ámbito financiero, las Oficinas Familiares descubrieron que invertir en activos tradicionales dejó de cumplir con los requisitos de rentabilidad; pero, por otro lado, también yace la necesidad de dar cumplimiento a los compromisos ambientales, sociales y de gobierno corporativo para adecuarse a una realidad más sostenible. 

Se sabe que en el ámbito de las Oficinas Familiares es difícil que empatan los objetivos de inversión, sobre todo cuando hay de por medio diferentes generaciones que tienen intereses en el patrimonio familiar; no obstante, en el plano de las inversiones en Asia, se entendió la importancia de la diversificación en las carteras, de modo que se abre la puerta a diferentes alternativas como fondos de cobertura, de infraestructura y fondos de capital riesgo. 

El concepto ESG tiene una vigencia de más de 40 años, luego de que se acuñara en una comisión de las Naciones Unidas en los años ochenta, pero que fue hasta 2015, cuando al firmarse el Acuerdo de París con varios objetivos ambientales como base, adquirió un nuevo impulso, el cual recientemente ha sido adoptado por las Oficinas Familiares para hacerlo latente a través de las inversiones que realizan. 

Existe un mayor compromiso con el medio ambiente y los problemas sociales, por tal motivo para alinear objetivos de rentabilidad y crecimiento con los acuerdos y regulaciones en materia de sostenibilidad, se están utilizando las inversiones ESG, las cuales de 2016 a 2020 generaron flujos por 530 mil millones de dólares. 

La tendencia popular en Asia también gana adeptos en otras latitudes. Por ejemplo, detalló que en México el 92% de los inversionistas consideran importante que sus inversiones tengan un impacto positivo en el mundo que nos rodea. 

La misma situación quedó reflejada en una encuesta de BlackRock, la cual se realizó a más de 425 inversionistas internacionales que manejan 25 billones de dólares, y que reveló la postura de estos agentes por duplicar sus inversiones sostenibles en los próximos cinco años; asimismo, una investigación realizada por la Universidad de Oxford indicó las empresas con métricas ESG tienen menor costo de capital y mejor acceso a financiamientos. 

Adicionalmente, las acciones e inversiones bajo perspectiva ESG suelen ser más resilientes a la volatilidad, lo que yace como un beneficio extra a los ojos de las Oficinas Familiares.